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miércoles, 20 de agosto de 2014
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viernes, 25 de julio de 2014
sábado, 19 de julio de 2014
Entrevista DEIA
¿Qué le parece el papel que le ha tocado en ‘Ciega a citas’?
-Ja, ja, ja... Ser ejecutiva, muy segura, valiente y con mucho poder profesionalmente; es un buen papel, ¿no? Una mujer de éxito, pero en la serie se descubre que es la ex novia de otro personaje, Carlos. Con él tuvo una relación traumática, la dejó de una manera un poco fea...
Exitosa en los negocios, pero no tanto en los personal.
-Exacto, fue una relación que no se cerró armónicamente. Ahora, Carlos, al volver a verla, vuelve a sentir por ella lo que sentía cuando eran adolescentes e intenta reconquistarla, pero en principio... va a ser que no. Lo que resta de mi personaje, Rebeca, lo vais a tener que ver por las tardes en la tele.
Una serie diaria conlleva mucho más trabajo, ¿cómo lo lleva?
-Como puedo, te acostumbras. Es más trabajoso y aparte se curra a un ritmo de impresión. Es la primera vez que hago una serie diaria. Eso hace que los tiempos sean totalmente diferentes a los que estaba acostumbrada antes con otros trabajos que he hecho en televisión.
¿Echa algo de menos del ritmo de serie semanal?
-Mira, en principio todo es trabajo, pero al ir tan rápido no te da tiempo a saborear las secuencias. También hay que decir a su favor que gana frescura. Como en todos los proyectos hay cosas positivas y negativas. Pero no me puedo quejar, es un lujo de trabajo.
¿Qué es lo último suyo que hemos visto en televisión?
-Frágiles y episodios sueltos en Los misterios de Laura. Lo más largo que he hecho en televisión ha sido Punta Escarlata.
¿Tiene otros proyectos entre manos en estos momentos?
-Mi marido, Dani Mateo, y yo estamos con la productora que tenemos. Estamos realizando un programa de radio para la Ser en el que somos locutores los dos, irá después del programa de Buenafuente. También vamos a producir el show de Wyoming, se estrena el 26 de septiembre en Madrid en teatro. Y estoy metida en un proyecto mío, muy personal, con mujeres para el teatro.
Parece que la vida del actor en estos momentos supone reinventarse continuamente, ¿no?
-Por supuesto. Estábamos mal acostumbrados, no sabíamos lo que era esto de la crisis. A mí nunca me faltaba trabajo como actriz...
¿Da vértigo cuando llega el parón?
-Claro. Cuando te llega esa época, puede llegar en cualquier momento aunque no haya crisis, te asustas, no haces pie y dices: Va a ser que de esto solo no voy a poder vivir. No puedes estar eternamente dependiendo de que otro te llame, así que te vas buscando un poco la vida, que es lo que toca. A mí eso de depender de los demás no me gusta nada, me pone muy nerviosa. ¿Sabes lo que pasa? Que tan pronto te quiere todo el mundo como se olvidan de ti. Sientes el desequilibrio absoluto. Esta profesión es muy caótica.
¿Cómo conviven dos estrellas en una misma casa?
-Muy felices. Muy bien, hay mucha luz. No vivo con la estrella, vivo con la persona, y, supongo, ya se lo preguntaré, que Dani opina lo mismo.
¿Y cómo es él?
-Ja, ja, ja... Maravilloso, si como estrella es maravillosa, como persona lo es mucho más. Gana con creces la persona a la estrella. Nos reímos mucho juntos, nos divertimos. Pero creo que de eso se trata.
Son los dos famosos, ¿hay muchos egos flotando en el ambiente?
-La verdad es que no. Los dos nos alegramos cuando uno consigue llevar a cabo un proyecto. Aunque sean victorias individuales las compartimos. También sufrimos las derrotas de la misma manera, somos un equipo, esto no es una competición para ver quién sobresale más. Hemos decidido compartir nuestra vida y no estaría nada bien lo contrario en la vida profesional. Nos da igual quién sea más famoso o consiga más premios.
¿A quién le paran más por la calle?
-¡Qué pregunta! Es evidente: a él. Ja, ja, ja... Él es más conocido y ser presentador te garantiza que la gente sepa más cómo eres. Date cuenta que yo solo interpreto un papel, pero puede que no tenga nada que ver con el personaje.
No todos los presentadores son como salen por la televisión.
-Pero es lo que la gente cree. Al ser cómico y hacer humor, la gente da por sentado que él tiene muy buen carácter.
¿Lo tiene?
-Sí, no puedo decir otra cosa.
martes, 15 de julio de 2014
Entrevista en mujerhoy.com
¿Cómo ha sido la incorporación a un equipo ya tan rodado?
Estoy muy contenta, porque son muy abiertos y se entregan mucho al trabajo y al resultado, y hay muy buen ambiente en esta serie. Me contaba Juanma que es uno de los creativos que desde la productora se puso mucho interés en que el equipo tuviese buena relación. Y yo creo que es algo que es fundamental hoy en día, ya que hay poco trabajo, que la gente con la que estás trabajando a diario sea gente con la que te puedas tomar una cerveza un día si surge. No te hablo de ser íntimos amigos porque eso sería imposible, pero sí poder tener una buena relación con tus compañeros.
Es que verse todos los días con alguien con quien no hay buena relación no es agradable para nadie…
Además, es que este trabajo nuestro es muy delicado. En el momento en el que hay una nota discordante, una persona que genere mal ambiente, o que se esté quejando o no quiera resolver y pone impedimentos… Se contagia enseguida al resto del equipo. Porque se está jugando con sentimientos y eso complicado.
¿Qué ha sido lo más difícil?
Hacer por primera vez una serie diaria, que no había hecho hasta ahora. No es lo mismo que hacer un prime time, no son lo mismo ni las horas de trabajo ni la manera de trabajar. Aquí se hace una toma o dos como mucho por secuencia y yo a eso no estaba acostumbrada. Yo he estado en series en las que de alguna manera se cuidaba más. Lo que pasa es que luego ves que aquí aunque se hace solo una toma o dos se tiene cuidado con las tramas aunque sean un poco reiterativas, porque es lo que tiene para que la gente se reenganche en cualquier momento y entienda que está pasando. Tiene mucha comicidad, no es una serie diaria al uso, no es un culebrón, entonces está bastante bien.
Ya has terminado de rodar tu parte, pero ¿hay posibilidad de que vuelvas a colaborar?
Matarme no me matan, así que siempre hay posibilidad de volver (risas).
Hablábamos con tu marido, Dani Mateo hace unos días y nos confesaba que tu vis cómica era superior a la suya. De hecho, aseguraba que te robaba algún chiste de vez en cuando…
Somos muy payasos. De hecho, siempre, cuando hace sus monólogos le digo: “Eh, ese chiste es mío” y te lo han reído más que ningún otro. Siempre estamos bromeando con eso. Pero es que sino no estaríamos juntos, tenemos un sentido del humor bastante similiar.
Más que en tus papeles, donde dejar ver tu vena más cómica es en tu cuenta de Twitter…
Es donde puedo demostrarlo, porque el resto son textos que me dan, con lo cual, tampoco puedo cambiarlo.
¿En este personaje vamos a ver esa faceta más cómica?
No es un personaje muy cómico, la verdad. Tiene un par de momentos así más cómicos, pero por la situación y por los personajes que la acompañan, pero no especialmente, porque es el lado romántico de Carlos.
Si pudieras elegir, qué tipo de personaje te gustaría interpretar?
Quizá una mujer con poder, pero desde lo femenino. Es decir, da la impresión de que las mujeres que tienen poder hoy en día tienen que parecer señores con peluca. Y tienen que marcar el ‘yo también soy igual de dura que un hombre o más’. Yo creo que no es necesario, porque el empoderamiento femenino de hecho es necesario y de hecho es una manera de que haya un equilibrio en esta vida y creo que se está perdiendo y creo que se podría perfectamente combinar.
En tu caso, ¿lo combinas?
Ahora estoy con la productora que tengo con Dani, The Entertainers, y estoy trabajando desde el otro lado con producción negociación, contratos… todo lo que conlleva la producción ejecutiva, y no hace falta ser un señor con un vestido. La gente de hecho agradece que puedas en un momento determinado mostrarte más dulce o tener estas faceta quizá más comprensiva que tenemos las mujeres. Todo ello sin perder autoridad en ningún momento. Yo creo que el personaje que elegiría iría por ahí porque creo que las mujeres estamos desubicadas en este aspecto. Es decir, Si quieres una mujer directivo es porque las cualidades que tiene como mujer te interesan. No solamente la faceta que ya te está cubriendo un hombre.
Y ahora que vas a caballo entre el lado de la producción y el de la actuación, ¿qué tienen cada lado de bueno y de malo?
Lo mejor del lado de actriz es que, con respecto a la organización, te lo dan todo hecho (risas). Me parece súper cómodo, y ya sabes que tienes tu sueldo, que no te falla, es una relajación importante. No digo con esto que no se trabaje como actriz, porque requiere esfuerzo. Pero se trata de un proceso más creativo con respecto a las emociones. Es más artístico. Y la producción estás jugando con otras reglas. Tienes que ser creativo, pero tienes que conseguir el sitio, el producto y el dinero para lanzarlo. Es una gymkana. Pero para mí es muy gratificante cuando sale adelante, porque has implicado tanto, te has implicado tanto, y ha dependido de ti en tantos puntos, que es para ti como tu hijo.
Aunque la posibilidad de volver a esta serie está ahí, nos consta que tienes otros proyectos en mente…
Me encantaría volver, me lo he pasado muy bien, pero sí, lo haría evidentemente una vez que ya tenga encaminado los otros proyectos que ya tengo en marcha. Gracias a dios que no nos falten.
Cuéntanos en ¿qué estáis trabajando actualmente?
Ahora mismo, Dani y yo estamos haciendo un programa para la Ser. Estamos los dos de locutores para este verano. Iremos después del programa de Buenafuente. Llevamos la producción de este programa de radio y además locutamos nosotros.
Vamos que de dormir poco este verano…Sí, ya dormimos poco. De hecho nos vemos a partir de las 11 y cuarto de la noche. Ese es nuestro rato hasta que nos vamos a la cama a dormir.
Estoy muy contenta, porque son muy abiertos y se entregan mucho al trabajo y al resultado, y hay muy buen ambiente en esta serie. Me contaba Juanma que es uno de los creativos que desde la productora se puso mucho interés en que el equipo tuviese buena relación. Y yo creo que es algo que es fundamental hoy en día, ya que hay poco trabajo, que la gente con la que estás trabajando a diario sea gente con la que te puedas tomar una cerveza un día si surge. No te hablo de ser íntimos amigos porque eso sería imposible, pero sí poder tener una buena relación con tus compañeros.
Es que verse todos los días con alguien con quien no hay buena relación no es agradable para nadie…
Además, es que este trabajo nuestro es muy delicado. En el momento en el que hay una nota discordante, una persona que genere mal ambiente, o que se esté quejando o no quiera resolver y pone impedimentos… Se contagia enseguida al resto del equipo. Porque se está jugando con sentimientos y eso complicado.
¿Qué ha sido lo más difícil?
Hacer por primera vez una serie diaria, que no había hecho hasta ahora. No es lo mismo que hacer un prime time, no son lo mismo ni las horas de trabajo ni la manera de trabajar. Aquí se hace una toma o dos como mucho por secuencia y yo a eso no estaba acostumbrada. Yo he estado en series en las que de alguna manera se cuidaba más. Lo que pasa es que luego ves que aquí aunque se hace solo una toma o dos se tiene cuidado con las tramas aunque sean un poco reiterativas, porque es lo que tiene para que la gente se reenganche en cualquier momento y entienda que está pasando. Tiene mucha comicidad, no es una serie diaria al uso, no es un culebrón, entonces está bastante bien.
Ya has terminado de rodar tu parte, pero ¿hay posibilidad de que vuelvas a colaborar?
Matarme no me matan, así que siempre hay posibilidad de volver (risas).
Hablábamos con tu marido, Dani Mateo hace unos días y nos confesaba que tu vis cómica era superior a la suya. De hecho, aseguraba que te robaba algún chiste de vez en cuando…
Somos muy payasos. De hecho, siempre, cuando hace sus monólogos le digo: “Eh, ese chiste es mío” y te lo han reído más que ningún otro. Siempre estamos bromeando con eso. Pero es que sino no estaríamos juntos, tenemos un sentido del humor bastante similiar.
Más que en tus papeles, donde dejar ver tu vena más cómica es en tu cuenta de Twitter…
Es donde puedo demostrarlo, porque el resto son textos que me dan, con lo cual, tampoco puedo cambiarlo.
¿En este personaje vamos a ver esa faceta más cómica?
No es un personaje muy cómico, la verdad. Tiene un par de momentos así más cómicos, pero por la situación y por los personajes que la acompañan, pero no especialmente, porque es el lado romántico de Carlos.
Si pudieras elegir, qué tipo de personaje te gustaría interpretar?
Quizá una mujer con poder, pero desde lo femenino. Es decir, da la impresión de que las mujeres que tienen poder hoy en día tienen que parecer señores con peluca. Y tienen que marcar el ‘yo también soy igual de dura que un hombre o más’. Yo creo que no es necesario, porque el empoderamiento femenino de hecho es necesario y de hecho es una manera de que haya un equilibrio en esta vida y creo que se está perdiendo y creo que se podría perfectamente combinar.
En tu caso, ¿lo combinas?
Ahora estoy con la productora que tengo con Dani, The Entertainers, y estoy trabajando desde el otro lado con producción negociación, contratos… todo lo que conlleva la producción ejecutiva, y no hace falta ser un señor con un vestido. La gente de hecho agradece que puedas en un momento determinado mostrarte más dulce o tener estas faceta quizá más comprensiva que tenemos las mujeres. Todo ello sin perder autoridad en ningún momento. Yo creo que el personaje que elegiría iría por ahí porque creo que las mujeres estamos desubicadas en este aspecto. Es decir, Si quieres una mujer directivo es porque las cualidades que tiene como mujer te interesan. No solamente la faceta que ya te está cubriendo un hombre.
Y ahora que vas a caballo entre el lado de la producción y el de la actuación, ¿qué tienen cada lado de bueno y de malo?
Lo mejor del lado de actriz es que, con respecto a la organización, te lo dan todo hecho (risas). Me parece súper cómodo, y ya sabes que tienes tu sueldo, que no te falla, es una relajación importante. No digo con esto que no se trabaje como actriz, porque requiere esfuerzo. Pero se trata de un proceso más creativo con respecto a las emociones. Es más artístico. Y la producción estás jugando con otras reglas. Tienes que ser creativo, pero tienes que conseguir el sitio, el producto y el dinero para lanzarlo. Es una gymkana. Pero para mí es muy gratificante cuando sale adelante, porque has implicado tanto, te has implicado tanto, y ha dependido de ti en tantos puntos, que es para ti como tu hijo.
Aunque la posibilidad de volver a esta serie está ahí, nos consta que tienes otros proyectos en mente…
Me encantaría volver, me lo he pasado muy bien, pero sí, lo haría evidentemente una vez que ya tenga encaminado los otros proyectos que ya tengo en marcha. Gracias a dios que no nos falten.
Cuéntanos en ¿qué estáis trabajando actualmente?
Ahora mismo, Dani y yo estamos haciendo un programa para la Ser. Estamos los dos de locutores para este verano. Iremos después del programa de Buenafuente. Llevamos la producción de este programa de radio y además locutamos nosotros.
Vamos que de dormir poco este verano…Sí, ya dormimos poco. De hecho nos vemos a partir de las 11 y cuarto de la noche. Ese es nuestro rato hasta que nos vamos a la cama a dormir.
Dice Dani que haces una labor social con él porque lo que llega a casa es un despojo humano.
Sí, pobrecito. Él, de todas formas, exagera. Me pone demasiado bien en las entrevistas. ¡Ya se lo diré cuando llegue a casa!
Sí, pobrecito. Él, de todas formas, exagera. Me pone demasiado bien en las entrevistas. ¡Ya se lo diré cuando llegue a casa!
"Qué asco de verano", con Dani Mateo en Cadena SER
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